Microbiota vaginal #13
Revisión de prensa
Por el Pr. Markku Voutilainen
Facultad de medicina de la Universidad de Turku; gastroenterología, Hospital Universitario de Turku, Finlandia
Espacio para el público general
Encuentra aquí tu espacio dedicadoen_sources_title
en_sources_text_start en_sources_text_end
Capítulos
Acerca de este artículo
Autor
Uso de endolisinas recombinantes para tratar la vaginosis bacteriana
Un estudio ha demostrado que la utilización de endolisinas recombinantes de tipo 1,4-beta-N-acetilmuramidasa codificadas en profagos de Gardnerella permite eliminar el biofilm bacteriano causante de la vaginosis bacteriana, sin dañar las bacterias beneficiosas de la microbiota vaginal. Para ello, los autores generaron varias endolisinas manipuladas genéticamente, enzimas de bacteriófagos que lisan la pared bacteriana, a través de un barajado de dominios (domain shuffling). Compararon su actividad bactericida en cepas de Gardnerella con la de endolisinas naturales. La actividad bactericida de las endolisinas recombinantes fue 10 veces mayor a la de cualquier enzima natural. Cuando se probó en un grupo de 20 cepas de Gardnerella de 4 especies diferentes (G. vaginalis, G. leopoldii, G. piotii y G. swidsinski), la endolisina más activa, denominada PM-477, demostró una eficacia superior a la de los antibióticos evaluados (metronidazol, tinidazol, clindamicina). Es más, la PM-477 no tuvo ningún efecto sobre los lactobacilos beneficiosos ni en otras especies de bacterias vaginales. Según los autores, la PM-477 es altamente selectiva para Gardnerella y mata cepas de cada una de las cuatro especies principales sin afectar a los lactobacilos beneficiosos ni a otras especies típicas de la microbiota vaginal. El efecto de la PM-477 se confirmó por microscopía en cultivos mixtos de Gardnerella y lactobacilos. Para ir más allá y analizar la eficacia de la PM-477 en un entorno fisiológico muy similar a la situación in vivo, los investigadores trataron hisopos vaginales de 15 pacientes con vaginosis bacteriana y los analizaron mediante hibridación in situ con fluorescencia (HISF). Demostraron que, en 13 de los 15 casos, la PM-477 eliminó la bacteria Gardnerella y disolvió físicamente los biofilms sin influir en la microbiota vaginal. Para los autores, las endolisinas son una prometedora alternativa terapéutica a los antibióticos para el tratamiento de la vaginosis bacteriana.