Tanto si es por motivos religiosos como para seguir la tendencia del “fasting”, el ayuno intermitente probablemente tiene efectos sobre nuestra microbiota intestinal. Se demostró en el ratón, pero no se había realizado ningún estudio en el ser humano hasta el momento y todavía menos durante el Ramadán. ¡Ya está hecho!
Se han realizado muy pocos estudios sobre el ayuno y sus efectos en la composición de la microbiota intestinal, porque son difíciles de modelizar. Sin embargo, como la alimentación es uno de los principales factores ambientales capaces de modelar nuestra microbiota intestinal, resulta lógico suponer que una privación prolongada de alimento puede modificar su composición. Un equipo de investigadores turcos llevó a cabo un pequeño estudio con 9 adultos de confesión musulmana (7 mujeres y 2 hombres) que practicaban el ayuno durante el Ramadán. Esta práctica secular, pilar del islam, consiste en no comer ni beber desde que sale el sol hasta que se pone, durante un periodo de 29 días. En el estudio, realizado entre el 18 de junio y el 16 de julio de 2015, la duración diaria del ayuno fue de 17 horas.
Una microbiota intestinal más sana
El análisis de las heces de los participantes reveló, al final del Ramadán, una mayor abundancia de bacterias beneficiosas de los grupos Bacteroides fragilis y Akkermensia muciniphila. Esta última representa entre el 3 y el 5 % de la comunidad microbiana de un individuo sano, pero su abundancia se reduce en caso de obesidad. A la inversa, disminuyó la abundancia de otras bacterias, aunque no de manera significativa. Por otra parte, el ayuno dio lugar a una reducción de la concentración de colesterol total y de la glucemia (concentración de azúcar en la sangre) en ayunas, lo cual confirma los resultados obtenidos en otro estudio. En cambio, los autores no observaron una disminución significativa del (sidenote:
Índice de Masa Corporal.
Cociente entre el peso en kg y el cuadrado de la estatura en m2.
) de los participantes, como habían demostrado otros trabajos, probablemente debido al escaso número de participantes en el estudio.
Resistencia a los cambios
Los autores sugieren que la mejoría de la composición de la microbiota intestinal después de un ayuno podría explicarse por la resistencia a los cambios alimentarios de las especies bacterianas beneficiosas, como Bacteroides y Akkermansia. Estos resultados, aunque preliminares, permiten comprender mejor la relación entre el ayuno y la microbiota intestinal, y deberán confirmarse con estudios más amplios.
Old sources
Bibliografia :
Özkul C, Yalınay M, Karakan T. Islamic fasting leads to an increased abundance of Akkermansia muciniphila and Bacteroides fragilis group: A preliminary study on intermittent fasting. Turk J Gastroenterol 2019; 30(12): 1030-5.