Caries: ¿ruleta rusa o mala suerte con las bacterias?
La salud bucodental no parece ser un juego de ruleta rusa…, sino más bien una cuestión de instalación de bacterias buenas entre los 6 y los 18 meses de vida del niño y, por lo tanto, de una higiene y una alimentación adecuadas. Un esfuerzo de los padres para rechazar el torno del dentista.
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Acerca de este artículo
El torno del dentista: su nombre basta para producir sudores fríos a la mayoría de nosotros. Y para hacernos temer un problema por desgracia banal en nuestras sociedades: 2000 millones de terrícolas tienen caries en los dientes definitivos y 514 millones de niños tienen caries en los dientes de leche. Puesto que las enfermedades bucodentales, aunque son en gran medida evitables, cuestan caro a nuestros sistemas de salud, la investigación se activa para encontrar defensas. Entre ellas, la microbiota oral.
En efecto, la salud bucodental podría estar relacionada con la presencia de ciertas bacterias bucales: las amables bacterias reductoras de nitratos de los géneros Neisseria y Haemophilus mantendrían lejos la caries dental y las enfermedades periodontales, mientras que F. nucleatum se asociaría a las (sidenote: Las enfermedades periodontales Las enfermedades periodontales afectan a los tejidos que rodean y sostienen los dientes. Se manifiestan por un sangrado o una hinchazón de las encías (gingivitis), dolor y, a veces, mal aliento. En las formas más graves, la destrucción de la fijación que une la encía al diente y al hueso que soporta el diente genera bolsas que provocan una movilidad de los dientes y, a veces, su caída. Profundizar WHO ) , la placa dental y el mal aliento.
Pero ¿cuándo y cómo estas bacterias colonizan la boca y deciden el futuro de los dientes? Muy pronto, parece responder un estudio 1 japonés publicado a finales de 2024.
3500 millones de personas se ven afectadas por afecciones bucodentales (caries dental, enfermedades periodontales, caída de dientes y cáncer de boca).²
2000 millones de personas sufren caries en los dientes definitivos y 514 millones de niños tienen caries en los dientes de leche.²
¡El cepillado desde el primer diente!
La primera semana de vida, cuando el niño se alimenta de leche, la microbiota oral parece bastante inmadura. Pero la situación evoluciona muy deprisa: entre los 6 y los 18 meses, como consecuencia de la introducción de los primeros alimentos sólidos y la aparición de los primeros dientes, ¡la microbiota oral del chiquitín se vuelve comparable a la del adulto!
19 % Las enfermedades periodontales graves afectan a alrededor del 19 % de la población adulta mundial, es decir a más de mil millones de personas en el mundo.²
20 % Solo el 20 % de las personas encuestadas en 2024 declaran que saben de forma precisa lo que es la microbiota bucodental (+3 puntos respecto a 2023).³
Y, sobre todo, nuestras bacterias aliadas, Neisseria, Haemophilus y el temible Fusobacterium, ya han instalado sus maletas. Con un contrato de larga duración: a partir de los 36 meses, la microbiota bucal de un niño ya casi no evoluciona.
Por lo tanto, todo parece decidirse antes de los 3 años del niño, incluso entre los 6 y los 18 meses: este corto intervalo de tiempo de maduración de la microbiota oral sería esencial para la futura prevención de las enfermedades bucodentales, como la caries. ¡Y también para nuestra futura factura de consultas al dentista!
En otras palabras, desde los 6 meses del niño y la aparición de los primeros dientes, la higiene bucodental y el cepillado de los dientes es primordial…, así como la limitación del azúcar (caramelos, jarabes, zumos…), ¡que alimentan la caries!