La alimentación con fórmulas para lactantes se asocia a alteraciones en la microbiota intestinal y a un aumento de la resistencia a los antibióticos
ARTÍCULO COMENTADO - NIÑO
Por el Prof. Emmanuel Mas
Gastroenterología y nutrición, Hospital de Niños, Toulouse, Francia
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Acerca de este artículo
Comentario sobre el artículo original de Pärnänen KMM et al. Am J Clin Nutr 2021 [1]
Los lactantes se enfrentan a un alto riesgo de contraer infecciones mortales, cuyo tratamiento consiste en antibióticos funcionales. Se encuentran genes de resistencia a los antibióticos (ARG) en elevadas cantidades en microbiomas intestinales de lactantes a los que no se han suministrado antibióticos, y la mortalidad infantil causada por infecciones resistentes es alta.
Los autores del presente artículo tenían un objetivo: determinar el impacto de una exposición temprana a la leche artificial en la carga de ARG en los recién nacidos y los lactantes prematuros o posmaduros. Una de las hipótesis de trabajo era que la alimentación puede ejercer una presión selectiva que influye en la comunidad microbiana del intestino del lactante, y que la exposición a la leche artificial aumenta la abundancia de taxones portadores de ARG.
El estudio ha demostrado que los recién nacidos alimentados con leche artificial presentaban una mayor abundancia relativa de agentes patógenos oportunistas como Staphylococcus aureus, S. epidermidis, Klebsiella pneumoniae, K. oxytoca y Clostridioides difficile. Estos lactantes presentaban asimismo un número significativamente menor de bacterias típicas de los lactantes, como las bifidobacterias, que ofrecen posibles beneficios para la salud.
El descubrimiento inédito de una correlación entre la exposición a la leche artificial y una mayor carga neonatal de ARG muestra que los facultativos deberían tener en cuenta el modo de alimentación además de la administración de antibióticos durante los primeros meses de vida para minimizar la proliferación de bacterias intestinales resistentes a los antibióticos en los lactantes.
¿QUÉ SE SABE YA SOBRE ESTE TEMA?
Las bacterias resistentes a los antibióticos son la causa de numerosas muertes en el periodo neonatal. La aparición de bacterias resistentes se ve favorecida por el uso de antibióticos. Esto se asocia a una mayor abundancia de genes de resistencia a los antibióticos (ARG) que se encuentran en esas cepas bacterianas resistentes o multirresistentes. Estos ARG se transmiten entre las bacterias mediante elementos genéticos móviles (MGE). Además, se sabe que el tipo de alimentación modifica la microbiota intestinal, así como la cantidad de ARG. Lo que no se ha descrito suficientemente en las publicaciones es la magnitud del impacto de la alimentación en la resistencia.
¿CUÁLES SON LOS PRINCIPALES RESULTADOS APORTADOS POR ESTE ESTUDIO?
Los autores incluyeron a 46 niños prematuros nacidos entre las semanas 26 y 37 de embarazo; 21 recibieron una alimentación con leche artificial, 20 con leche materna enriquecida y 5 con leche materna. Se recogieron heces hasta el día 36 para analizar la composición de la microbiota intestinal y la presencia de ARG. Treinta lactantes recibieron un tratamiento con antibióticos: la recogida de heces se realizó aproximadamente dos semanas después de terminar el tratamiento para limitar los factores de confusión.
Para comparar los resultados con los datos extraídos de otras publicaciones, se analizó en paralelo un metaanálisis de 5 estudios que incluía a 696 neonatos con datos similares.
Los resultados indican que los recién nacidos que fueron alimentados con leche artificial presentaban una cantidad significativamente más alta de ARG que los recién nacidos que habían tomado leche materna enriquecida (x3,6; IC95% 1,61-8,9) o leche materna (x4,3; IC95% 1,61-11,56) (p<0,01) (Figura 1). La abundancia de MGE aumentaba en proporción similar (p<0,05). Las Enterobacteriaceae, de quienes se sabe que su genoma contiene más ARG móviles, eran más abundantes en los lactantes alimentados con leche preparada para lactantes (p<0,05) (Figura 2) y tendían a estar inversamente correlacionadas con la edad gestacional (p<0,1). La abundancia de ARG disminuía en los embarazos más largos (x0,72 ; IC95% 0,57-0,89) (p<0,001). Numerosos ARG eran más abundantes en los lactantes alimentados con leche artificial, incluidos los genes que codifican las betalactamasas de amplio espectro presentes en Klebsiella (p<0,05).
Se hallaron resultados similares en el metaanálisis: se observó un aumento relativo del 70% de los ARG en los recién nacidos alimentados con preparados para lactantes (p=0,013). La mediana de los ARG era más elevada en estos recién nacidos alimentados con preparados para lactantes en todas las cohortes (Figura 3). Por último, el análisis de la microbiota intestinal reveló que las bacterias pertenecientes a las familias Bifidobacteriaceae, Veillonellaceae, Clostridiaceae, Lachnospiraceae y Porphyromonadaceae (que incluyen bacterias anaerobias estrictas) disminuyeron en los neonatos alimentados con preparados para lactantes; y al contrario, aumentaron las bacterias anaerobias facultativas que pertenecen a Enterobacteriaceae, Staphyloccoccaceae y Enterococcaceae (p<0,05). Del mismo modo, varias especies potencialmente patógenas, que incluyen especies anaerobias facultativas como S. aureus, S. epidermidis, K. pneumoniae, K. oxytoca, y una especie anaerobia estricta Clostridioides difficile aumentaron en los neonatos alimentados con preparados para lactantes (p<0,001). El uso de preparados para lactantes favorece, pues, la proliferación de bacterias patógenas con ARG.
¿CUÁLES SON LAS CONSECUENCIAS EN LA PRÁCTICA?
Estos resultados respaldan los beneficios de la lactancia materna. La alimentación de los recién nacidos prematuros con leche artificial se asocia a un aumento del 70% de los ARG en comparación con los que han sido alimentados con leche materna exclusivamente. El enriquecimiento de la leche materna provoca un menor aumento de estos ARG.
PUNTOS CLAVES
- El uso de preparados para lactantes se asocia a un aumento de los genes de resistencia a los antibióticos (ARG).
- Esta resistencia se transmite entre las bacterias a través de elementos genéticos móviles, con un predominio de Enterobacteriaceae en los lactantes alimentados con preparados.
CONCLUSIÓN
Además del uso adecuado de los antibióticos, es importante tener en cuenta el tipo de alimentación que reciben los recién nacidos prematuros, y priorizar la lactancia materna para evitar la proliferación de bacterias resistentes.