Síndrome coronario agudo (SCA): ¿la microbiota intestinal en el núcleo del riesgo?
Este estudio sugiere un enfoque completamente nuevo en la predicción, e incluso el tratamiento, de pacientes que padecen enfermedades cardiometabólicas: centrarse en los metabolitos empobrecidos en lugar de los enriquecidos e interrogarse sobre un índice de masa corporal (IMC) más bajo de lo previsto.
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Acerca de este artículo
Los avances en prevención, diagnóstico y tratamiento no han cambiado el hecho de que la enfermedad de las arterias coronarias siga siendo una de las principales causas de morbilidad y mortalidad en todo el mundo. Esta enfermedad constituye un proceso fisiológico complejo que involucra distintos factores de riesgo que interactúan entre sí. Entre estos múltiples factores, diversos metabolitos circulantes derivados de la microbiota intestinal actualmente se reconocen como asociados con las enfermedades cardiovasculares. De ahí este estudio sobre la naturaleza multifactorial de la enfermedad coronaria, que analiza específicamente la microbiota intestinal y los metabolitos séricos de 199 pacientes israelíes con síndrome coronario agudo (SCA).
Cuando la ausencia de metabolitos indica la enfermedad
Los pacientes con SCA presentaron marcas microbianas intestinales (alrededor de veinte bacterias empobrecidas o enriquecidas) y metabolómicas (cientos de metabolitos alterados) distintas de los 970 controles. Ya se había observado cierta disbiosis intestinal: un empobrecimiento relativo de las (sidenote: bacterias productoras de butirato Clostridium, Anaerostipes hadrus, Streptococcus thermophilus y Blautia ) y un enriquecimiento de Odoribacter splanchnicus y Escherichia coli. Pero los investigadores también notaron la menor presencia de una especie bacteriana hasta entonces desconocida de la familia Clostridiaceae: SGB 4712. Esta disminución se encontró en una cohorte geográficamente distinta (MetaCardis, norte de Europa), lo que confirma la solidez de su observación. Ahora bien, la presencia de SGB 4712 se muestra negativamente asociada con metabolitos cardiotóxicos y positivamente ligada a otros protectores. Por lo tanto, SGB 4712 podría desempeñar un papel protector en el desarrollo de la enfermedad coronaria, a través de un conjunto de metabolitos sanguíneos circulantes. Es decir, potenciales nuevos objetivos terapéuticos.
El papel protector de la microbiota en la enfermedad coronaria
Segundo resultado: las marcas metabólicas observadas en pacientes con SCA fueron específicas para cada paciente.
- En estos pacientes, la disminución de ciertas bacterias estaba relacionada sobre todo con la microbiota y la alimentación, que actuarían en una etapa temprana de la enfermedad coronaria a través de una deficiencia de metabolitos protectores (síndrome metabólico).
- Por el contrario, los (sidenote: Factores de riesgo tradicionales de las enfermedades cardiovasculares edad, sexo, datos antropométricos, presión arterial, tabaquismo y diabetes ) y la genética intervendrían en una etapa posterior en el SCA y los accidentes cardiovasculares.
Según los autores, la microbiota podría desempeñar un papel protector en la enfermedad coronaria, lo que permitiría que perfiles clínicos similares sigan una trayectoria patológica diferente.
Predecir a través del IMC
Finalmente, un modelo predictivo del índice de masa corporal (IMC) basado en la metabolómica de la cohorte sin SCA predijo un IMC superior al real cuando se aplicó a pacientes con SCA. Esto sugiere que el patrón metaboloma-IMC se altera en pacientes con SCA... y que una sobreestimación del IMC a través de este modelo podría reflejar una ateroesclerosis más extensa.