Embarazo: ¿la disbiosis vaginal es responsable de las complicaciones en caso de COVID-19?
Contraer la COVID-19 durante el embarazo aumenta el riesgo de complicaciones, sobre todo si la infección es grave. Un estudio señala el papel de la disbiosis vaginal en esta relación.
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Acerca de este artículo
35% Solo 1 de cada 3 dice que su médico le ha enseñado qué es la microbiota vaginal y para qué sirve
Frente a la COVID-19, la mujer embarazada presenta un mayor riesgo de desarrollar una forma grave y complicaciones del embarazo, como una preeclampsia o un parto prematuro. Ahora bien, se conoce el papel de una microbiota vaginal equilibrada en el desarrollo óptimo del embarazo. ¿Y si los efectos negativos de la COVID-19 en la mujer embarazada pasaran por la microbiota vaginal?
Con el fin de comprobar esta hipótesis, unos investigadores realizaron un estudio prospectivo de casos y controles que incluía 28 mujeres embarazadas no infectadas y 19 mujeres embarazadas enfermas de COVID-19 (13 casos leves e incluso asintomáticos y 6 casos moderados a graves, 2 de ellos con necesidad de tratamiento con antibióticos y antivirales).
Más diversidad y menos lactobacilos entre las embarazadas con COVID-19
Se obtuvo la microbiota vaginal mediante un frotis durante la fase activa de la enfermedad y al mes siguiente de la curación, y se evaluó por secuenciación del gen del ARN de 16S. El grupo COVID-19 presentaba una diversidad significativamente más elevada que el grupo de control. Además, Bacteroidetes predominaba sobre Firmicutes y, en lo referente al género bacteriano, Lactobacillus sp. era significativamente menos abundante que en el grupo de control. Los estudios precedentes habían mostrado que existía un mayor riesgo de aborto o de parto prematuro en las mujeres embarazadas con una microbiota vaginal pobre en lactobacilos. Lo cual corroboran los datos presentes, puesto que tres mujeres dieron a luz prematuramente en el grupo de COVID-19 (frente a 0 en el grupo de control).
¿La gravedad de la COVID-19 tiene relación con la disbiosis vaginal?
A pesar del pequeño tamaño de la muestra, los investigadores constataron otras diferencias de composición de la microbiota vaginal en el grupo COVID-19. En particular, las mujeres con formas de COVID-19 moderadas a graves presentaban concentraciones mucho más elevadas de Ureaplasma spp.: 2,05 % frente a 0,1 % en caso de formas asintomáticas a leves. El género Ureaplasma está implicado en diferentes infecciones ginecológicas (salpingitis, uretritis y cervicitis), y su presencia aumentada en caso de COVID-19 grave también va a favor de una disbiosis vaginal asociada a la vez a la infección por el SARS-CoV-2 y al riesgo de complicaciones del embarazo. De manera que, de los tres nacimientos prematuros detectados en este estudio, dos tuvieron lugar en el subgrupo COVID-19 moderado a grave (n = 6).
Por ello, aunque el presente estudio no permite establecer una relación de causalidad, estos resultados sugieren que la COVID-19 provocaría en la mujer embarazada una alteración desfavorable del microentorno vaginal. Esto sería tanto más marcado cuanto que la infección fuera grave y podría generar un mayor riesgo de complicaciones, como el parto prematuro.