El contenido de heces de lactantes con cólicos induce hipersensibilidad visceral en ratones
Artículo comentado - niño
Por el Pr. Emmanuel Mas
Gastroenterología y nutrición, Hospital de Niños, Toulouse, Francia
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Acerca de este artículo
El comentario del artículo original de Eutamène et al. (Neurogastroenterol Motil 2017)
Poco se comprende de la fisiopatología de los cólicos infantiles, a pesar de que diversos estudios informan sobre la disbiosis intestinal en lactantes con cólicos. Nuestro objetivo fue evaluar la hipótesis de que la disbiosis asociada a los cólicos está relacionada con una hipersensibilidad visceral desencadenada por una alteración del contenido intraluminal.
Se estudiaron muestras fecales de siete lactantes con cólicos y de otros siete sin cólicos. Se infundieron sobrenadantes fecales (SF) en cólones de ratones C57/Bl6 (n=10/muestra). Posteriormente se evaluó la sensibilidad visceral en los animales mediante el registro de la respuesta muscular abdominal a la distensión colorrectal (DCR) a través de una electromiografía (EMG). Se evaluó la actividad de las proteasas de cisteína y serina en los SF con sustratos específicos. Se analizó la composición de la microbiota fecal de lactantes mediante la extracción de ADN y de la pirosecuenciación del gen 16S rARN.
Los SF de los lactantes con cólicos desencadenaron una actividad mayor en la EMG que los SF de los lactantes sin cólicos, en respuesta a los mayores volúmenes de DCR y en general, ya que se evaluó el área bajo la curva de la EMG en todos los volúmenes de la DCR. El tiempo de llanto de los lactantes está fuertemente relacionado con la actividad de la EMG de los ratones. La variedad de microbiota y la diversidad filogénica aumentaron en el grupo con cólicos, sin mostrar alteraciones destacadas en la composición microbiana. En el grupo con cólicos solo aumentaron Bacteroides vulgatus y Bilophila wadsworthia. La abundancia de Bacteroides vulgatus está positivamente relacionada con la sensibilidad visceral. No se encontraron diferencias en las actividades de la proteasa.[1]
¿Qué es lo que ya se sabe sobre este tema?
Los cólicos del lactante forman parte de las alteraciones funcionales gastrointestinales y se definen según los criterios de Roma. Su fisiopatología todavía es poco conocida, si bien se sospecha de un mecanismo intestinal doloroso. Hay estudios que sugieren que una perturbación de la microbiota intestinal, un aumento de la permeabilidad intestinal, y una inflamación intestinal de bajo grado, estarían implicados en la hipersensibilidad visceral. Esos factores intervienen en la fisiopatología del síndrome del intestino irritable. En este síndrome, una anomalía del balance entre proteasas y antiproteasas tiene un rol en la hipersensibilidad visceral y en la inflamación de bajo grado.
¿Cuáles son los principales resultados brindados por este estudio?
El objetivo de este estudio era investigar si una perturbación de la microbiota intestinal, asociada a un aumento de las proteasas intestinales, era capaz de inducir una hipersensibilidad visceral. En el estudio se incluyeron niños en lactancia materna de entre 1 y 4 meses de edad. No había diferencias en cuanto a la duración del embarazo, al peso en el nacimiento y a los antecedentes familiares de alergia, entre el grupo con cólicos (n = 7) y el grupo control (n = 7). Por definición (criterios de Roma III), solo la duración de llanto difería, en promedio de 240 ± 95,95 minutos (grupo con cólicos) frente a 24,04 ± 19,65 minutos (grupo control).
Los enemas rectales de heces de lactantes con cólicos provocaron una hipersensibilidad significativa durante la distensión rectal con volúmenes más importantes (+55 %, p < 0,001 a 0,06 mL; +27 %, p < 0,001 a 0,08 mL y +19 %, p < 0,001 a 0,1 mL) (Figure 1), pero también en respuesta global (aumento del área bajo la curva de +33 %, p < 0,001). Además, existía una correlación positiva con la duración de llanto para esos volúmenes de distensión (Figure 2). Por el contrario, no había diferencias en cuanto a las cantidades de proteasas (serina, y sustancias similares a la tripsina y la elastasa) entre ambos grupos.
Finalmente, el análisis de la microbiota mostró un aumento de la diversidad y una mayor abundancia de Bacteroides vulgatus y de Bilophila wadsworthia en los niños con cólicos de lactante. La abundancia relativa de B. vulgatus estaba asociada positivamente a la hipersensibilidad de los ratones (p = 0,021) y no significativamente a la duración de lo llanto (p = 0,067).
Puntos clave
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Las heces de lactantes con cólicos desencadenan una hipersensibilidad visceral, como los que encontramos en el síndrome del intestino irritable.
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Se necesitan estudios complementarios para determinar los compuestos implicados, su mecanismo de acción y su relación con una perturbación de la microbiota intestinal.
¿Cuáles son las consecuencias en la práctica?
Este estudio muestra que un componente contenido en las heces del lactante con cólicos es capaz de desencadenar una hipersensibilidad visceral en ratones. Podría tratarse de un aumento de un compuesto nociceptivo o de la disminución de un compuesto antinociceptivo. No se trata de una alteración del balance proteolítico, pero es posible que ese compuesto sea provocado por una microbiota intestinal diferente. Sin embargo, es necesario realizar estudios complementarios para identificar cuál podría ser ese compuesto, y cuál sería el mecanismo de acción.
Conclusión
La transferencia de heces de lactantes con cólicos vía enema a ratones es capaz de inducir una hipersensibilidad visceral. Esto causa un mecanismo abdominal doloroso y la implicación, directa o indirecta, de la microbiota intestinal en la fisiopatología de los cólicos del lactante. Este modelo podría utilizarse para determinar cuáles son las vías metabólicas modificadas por una perturbación de la microbiota intestinal e implicadas en los cólicos del lactante.