Comprender, predecir la respuesta al tratamiento y adaptar la terapia. Un nuevo estudio indica que la microbiota intestinal de los pacientes que padecen una enfermedad inflamatoria crónica del intestino (EII) podría utilizarse para predecir la eficacia del tratamiento inmunosupresor. Un avance significativo para enfermedades especialmente incapacitantes.
Se llaman enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa, pertenecen a la familia de las EII crónicas y comparten una característica: la inflamación descontrolada de la pared de una parte del tubo digestivo que causa diferentes síntomas durante los brotes inflamatorios. Aunque por el momento estas enfermedades no tienen cura, existen tratamientos para reducir la inflamación, como el (sidenote:
Infliximab
Una bioterapia anti-TNF-α (proteína responsable de la inflamación de los tejidos).
)(IFX). El problema es que un tercio de los pacientes no responden a este tratamiento y no se conoce ningún (sidenote:
Biomarcador
Característica biológica medida de forma objetiva que permite evaluar la respuesta a un tratamiento. Esta respuesta puede ser completa o parcial.
) capaz de predecir la respuesta al tratamiento. Los investigadores de este estudio quizá encontraron la solución en la microbiota intestinal.
Una microbiota intestinal diferente antes del tratamiento…
Varios estudios demostraron una asociación entre la composición de la microbiota intestinal (bacterias y, más recientemente, hongos) y las EII crónicas. Con objeto de identificar marcadores de respuesta favorable al tratamiento con IFX, los investigadores evaluaron el impacto del tratamiento sobre la composición de la microbiota intestinal (sidenote:
25 pacientes con la enfermedad de Crohn (EC) y 47 con colitis ulcerosa (CU).
) con una EII crónica y tratados con IFX. El análisis de la microbiota intestinal (diversidad de las bacterias y hongos) se realizó en muestras de heces recogidas antes del tratamiento y hasta 1 año después del inicio de este. Los pacientes se clasificaron en tres grupos según la respuesta al tratamiento. El estudio muestra que, antes del inicio del tratamiento, la composición bacteriana y fúngica de la microbiota de los pacientes con una EII crónicas era significativamente diferente entre los tres grupos de pacientes, que respondían de forma distinta al tratamiento.
…que permite predecir la respuesta al tratamiento
Después del inicio del tratamiento, también se observaron diferencias significativas entre los tres grupos de pacientes: los pacientes que no respondían presentaban cantidades reducidas de bacterias con propiedades antiinflamatorias y una mayor abundancia de hongos (Candida) y bacterias proinflamatorias. Por lo tanto, estos resultados sugieren que la microbiota intestinal desempeña un papel importante en la respuesta al tratamiento.
Sobre la base de este descubrimiento, los investigadores identificaron algunas bacterias y hongos presentes antes del inicio del tratamiento en el intestino de los pacientes, que podrían servir de indicadores para evaluar la respuesta al tratamiento con IFX. La identificación temprana de los pacientes que no responden permitiría modificar rápidamente el tratamiento, con la consecuencia de limitar los efectos secundarios y reducir los costos generados. ¡Una estrategia 100% ganadora!
Old sources
Bibliografia:
Ventin-Holmberg R, Eberl A, Saqib S, et al. Bacterial and fungal profiles as markers of infliximab drug response in inflammatory bowel disease. J Crohns Colitis. 2020 Dec 10:jjaa252.