Enfermedades infecciosas urogenitales

Contrariamente a una creencia todavía muy extendida, la orina nunca es estéril, sino que alberga una microbiota específica, y una pérdida de diversidad podría representar un factor de riesgo de infección urinaria. En cambio, la microbiota vaginal está equilibrada cuando muestra poca diversidad y está dominada por un reducido grupo de lactobacilos, y la pérdida de esta flora dominante podría asociarse con infecciones genitales bajas. De ahí los esfuerzos de la ciencia para modular las microbiotas vaginal y urinaria mediante la administración de probióticos (bacterias y levaduras) e incluso un trasplante de microbiota vaginal.