Posmenopausia: actuar sobre los síntomas sin dañar la microbiota vaginal
¿Óvulos de estradiol o crema hidratante para el cuidado íntimo?
Mientras que los dos parecen igual de eficaces para aliviar los síntomas de la menopausia, ejercen un impacto muy distinto sobre la microbiota vaginal...
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Acerca de este artículo
52% Solo 1 de cada 2 mujeres sabe que, desde la infancia hasta la menopausia, la microbiota vaginal no permanece igual
Sequedad vaginal, picores, ganas frecuentes de orinar, dolor durante las relaciones sexuales... ¡El periodo que sigue a la menopausia (posmenopausia) no es un camino de rosas! Los médicos hablan de síndrome genitourinario de la menopausia (SGM),1 la mayoría de cuyos síntomas pueden atribuirse a la falta de estradiol que caracteriza este periodo. Su severidad es variable y puede aliviarse mediante tratamientos hormonales (óvulos vaginales a base de estradiol o un tratamiento no hormonal, como la aplicación de una crema vaginal hidratante).
¿Pero cuál es su impacto sobre el pH de la vagina, la microbiota vaginal y las sustancias producidas por los microorganismos que la componen (metabolitos)?
Menopausia y posmenopausia
La menopausia se define como la detención de la ovulación y la desaparición de la regla, como consecuencia de la interrupción de la secreción de estrógenos y progesterona.4 Se produce generalmente en torno a los 50 años de edad. El periodo que sigue se denomina “posmenopausia”5 y se caracteriza por la aparición de diversos síntomas (sofocos, insomnio, fatiga, irritabilidad, sequedad vaginal...) y por un mayor riesgo de padecer ciertas enfermedades (osteoporosis, enfermedades cardiovasculares).6
Importancia de la microbiota vaginal para la salud
Es bien sabido que las bacterias de la microbiota vaginal contribuyen a mantener un entorno vaginal sano. A diferencia de la microbiota intestinal, la microbiota vaginal está equilibrada cuando está poco diversificada y contiene principalmente lactobacilos. Algunas de estas bacterias producen una sustancia (ácido láctico) que mantiene un pH ácido en la vagina (pH ≤ 4,5), evitando así la proliferación de patógenos. Al llegar la menopausia, la concentración de estrógenos disminuye considerablemente y, como consecuencia, el pH vaginal aumenta y la microbiota vaginal cambia (menos lactobacilos y mayor diversidad bacteriana).2
Explorar este tema
No todos los tratamientos tienen el mismo impacto en la microbiota vaginal
En este nuevo estudio clínico,3 los investigadores incluyeron 144 mujeres posmenopáusicas (media de edad de 64 años) con molestias vulvovaginales moderadas a severas. Compararon el impacto sobre la microbiota de un óvulo vaginal de estradiol con los de un gel hidratante y un doble placebo (óvulo y gel sin compuesto activo).
Después de 12 semanas, la microbiota vaginal del 80% de las mujeres del grupo del estradiol estaba dominada por comunidades de Lactobacillus y Bifidobacterium, frente a solo el 36% en el grupo de la crema hidratante y el 26% en el grupo placebo. Además, en las mujeres tratadas con estradiol, más de la mitad de los metabolitos del líquido vaginal habían cambiado, en especial con un aumento de la producción de lactato que sin duda contribuyó a la mayor reducción del pH observada en este grupo.
Estradiol para preservar una intimidad sana
El efecto del estradiol fue más intenso en las mujeres que tenían inicialmente una microbiota vaginal muy diversificada (considerada menos sana) y un pH elevado. Según los investigadores, esta hormona podría estimular la actividad metabólica de bacterias beneficiosas productoras de ácido láctico, como los lactobacilos y las bifidobacterias, lo cual disminuiría el pH. Por lo tanto, sugieren preferir los óvulos de estradiol, ya que pueden ofrecer ventajas adicionales para la salud genitourinaria de las mujeres posmenopáusicas.